martes, septiembre 25, 2007

Maldita Primavera

Quisiera tener la capacidad de eliminar algunas cosas de mi vida, algunos recuerdos insulzos, divagantes, torpes e inestables. También desearía reconverger, cambiar de piel y corregir errores. No, creo que lo último ya no lo haría. Las cosas suceden por alguna razón inexplicable y no tengo omnipotencia (ni me gustaría tenerla) para su morfismo.

Amo ver las hojas caer en otoño, el sol salir cada mañana los días de verano, quedarme en cama los días fríos de invierno (además de usar bufandas, casi una de mis adicciones). Todas las estaciones tienen algo mágico en el aire, todas agradables a mis sentidos, a excepción de la primera.

Esa estación de horrores en mi ser, de ver a tanta gente contenta y yo triste; a tantos amando, distrayendo sus miradas en las flores, compadeciendo a los pobres de alma, disfrutando de la vida e de otros.

Maldigo a los plátanos orientales, a quienes los hayan plantado y todos aquellos que han hecho de mi existencia septiembrista un pasaje tedioso. A esos que no tomaron en cuenta lo malo que puede ser la naturaleza en flor. Ellos no saben el tenor de mis razones, ni las comprenderán jamás.

Por eso te maldigo a ti y a todas las que vienen. A esas que te suceden cada vez con más zaña, esas que me hieren las entrañas, la piel y los pulmones, las que corroen mi vida y sonrosan mi nariz analcoholizada.

Nada era como yo creía en esos pasajes infantiles, donde escuchaba a Yuri tarareando amores. Dulde embustera, maldita bastarda.

1 comentario:

Perdido dijo...

Hola
Me senti identificado con varias frases, el paso del tiempo y ojala la posibilidad de hacer cambios.....mas no se puede.
La primavera y los platanos orientales, comparto el desprecio.

Saludos
Pancho Perdido